PUNTOS FUERTES: Talento joven por desarrollar. Máxima flexibilidad salarial.
PUNTOS DÉBILES: Falta de tiro exterior. Estructuras, de ataque y defensa, por formar.
Los Pistons no llegaron al 30% de victorias por segunda campaña consecutiva aunque para su fase actual de proyecto, de acumulación de talento dentro de su profunda reconstrucción, lo valioso llegó a continuación: hacerse con Jaden Ivey y Jalen Duren en el Draft (con el número cinco y trece respectivamente).
Detroit, en manos de Dwane Casey, excelente formador y un técnico adecuado para corregir malos hábitos, no tiene urgencia alguna por ganar. Sí por ir desarrollando los mimbres que comienza a tener en plantilla. De hecho, unir a Ivey con Cade Cunningham, número uno del Draft anterior (2021), representa el primer desafío real para la franquicia, en términos de asociar dos grandes jugadores de perímetro sobre los que construir.